¡Agentes fronterizos asesinan y salen impunes! ¡Justicia para Anastasio
Hernández Rojas!
18 de noviembre de 2015 | Periódico Revolución |
revcom.us
El 6 de noviembre, el Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció que
no entablará cargos contra ninguno de los agentes fronterizos que mataron a
Anastasio Hernández Rojas hace 5 años cuando estaba en su custodia. Cuando lo
mataron, Anastasio tenía 42 años y llevaba ya más de una década viviendo en San
Diego con su esposa y 5 hijos nacidos en este país.
El 28 de mayo del 2010, Anastasio fue detenido con su hermano cuando entraban
ilegalmente a Estados Unidos. Declaraciones juradas en la demanda civil indican
que cooperaron, pero Anastasio resultó herido durante el procesamiento por la
patada de un agente, y pidió ayuda médica y una audiencia de inmigración. En
vez, el supervisor decidió que iba a “regresar voluntariamente” a México — y a
la fuerza lo empujaron a través de una puerta de entrada. Los agentes dicen que
armó resistencia a la deportación; y le dieron una feroz paliza.
Mientras estaba esposado y tenía los pies amarrados, tirado en el suelo
apenas moviéndose, y pidiendo auxilio, los guardias lo siguieron golpeando y lo
dejaron sangrando, a la vez que gritaban “no resistas”. Otra docena de agentes
se quedaron mirando. Desde el puente San Ysidro unas personas grabaron la paliza
inhumana de Rojas. Por eso cuando terminaron los matones fueron al puente y
confiscaron los celulares y borraron la grabación del asesinato.
El médico forense falló que la muerte de Hernández Rojas fue un homicidio,
que murió de un ataque cardíaco tras sostener heridas masivas como resultado de
una paliza: “determinó que el pecho, el estómago, las caderas, las rodillas, la
espalda, los labios, la cabeza y las ojeras estaban hinchadas; además de 5
costillas facturadas y daños a la espina dorsal”. A pesar de esas conclusiones y
un video del ataque, no entablaron ningunos cargos contra los agentes.
Pero en el 2012 surgió un segundo video. Resulta que una mujer escondió el
celular cuando los agentes se los quitaron a los otros. Lo guardó dos años por
temor, pues muestra el asesinato de un hombre. En el 2012 el canal PBS lo
transmitió. El video contradice claramente las pruebas y evidencias de los
agentes que mataron a Anastasio.
Se volvió necesario lidiar con el clamor a otro nivel. Por tanto se metió el
Departamento de Justicia, y no fue sino hasta 5 años después del asesinato de
Hernández Rojas que emitió su veredicto: que no hay pruebas más allá de toda
duda razonable que Hernández Rojas fue asesinado.
Un comunicado de prensa el Departamento de Justicia dice: “un equipo de
fiscales federales experimentados determinó que no existían pruebas suficientes
para la presentación de cargos federales penales de derechos civiles”, porque no
pudieron comprobar que los agentes fronterizos actuaron deliberadamente, o sea,
“con la intención específica de privar a la víctima de un derecho
constitucional”.
A lo que hay que decir: un sistema en el cual una persona que no está
haciendo nada malo no tenga el derecho de vivir —y de no ser torturado
y asesinado brutal y sádicamente por una chusma de policías— es un sistema y una
constitución que tienen que ser barridos por una revolución y reemplazados por
un sistema (y una constitución) completamente diferentes donde algo así jamás
pueda suceder.
¿Y por qué ni siquiera podían entablar cargos de homicidio involuntario
contra ninguno de los agentes, en cual caso lo único que tendrían que acusar al
agente federal es “de cometer un acto lícito de manera ilícita, o sin el cuidado
debido y prudencia, que podría resultar en muerte”? Porque “las acciones de los
agentes federales no se hicieron sin el cuidado debido y
prudencia”.Piénselo: para el Departamento de Justicia el asesinato de una
persona sujetada representa el uso del cuidado debido y prudencia. ¿Qué nos dice
eso sobre el papel del sistema de in-justicia, a todo nivel, al absolver a
quienes han sido dotados con el monopolio de usar violencia contra el
pueblo?
El abogado que representa a la familia en la demanda civil señaló: “Esperaron
hasta que se venciera la prescripción, y cuando solo quedaba el cargo de
homicidio decidieron que no había suficientes pruebas para el cargo de
homicidio”. Este es aun otro ejemplo de lo que Bob Avakian ha señalado: “Sí hay
una conspiración, para absolver a los policías”.
Cientos de personas expresaron su ira en San Diego la noche que exoneraron a
los agentes fronterizos asesinos. María Puga, esposa de Hernández Rojas, dijo:
“Cómo podemos creer en el gobierno si no puede hacer justicia. Desde el
principio parecía que la investigación iba a favor de los agentes; salieron
impunes de asesinato”. La madre de Anastasio dijo: “Esto no es justicia. Parece
que la justicia solo es para los ricos y no para los pobres… Dicen que nadie es
responsable de la muerte de mi hijo, pero si hay responsables. Los agentes que
le golpearon, que le dispararon cargas eléctricas y que le estrangularon, ellos
son los responsables”. Y su hermano Bernardo dijo: “Si alguien le pega a un
perro, le acusan. Estos agentes mataron a mi hermano, pera nada les va a pasar a
ellos. Eso no es justo. ¿Dónde está la justicia?”.
¡Hazte voluntario para traducir al español otros artículos como este! manda un correo electrónico a espagnol@worldcantwait.net y escribe "voluntario para traducción" en la línea de memo.
E-mail:
espagnol@worldcantwait.net
|