Agencia del gobierno de Estados Unidos perdió el rastro
de 1,475 niños migrantes
Agencia del gobierno de Estados Unidos perdió el rastro de 1,475 niños migrantes y las
demoras para resolver su situación los expone a los traficantes de personas
AP
26 de Abril de 2018
Foto de AP. |
Las autoridades de una agencia federal del gobierno de Estados Unidos
perdieron el rastro de casi 1,500 niños migrantes el año pasado, después de que
una agencia del gobierno colocó a los menores en casas de patrocinadores adultos
en distintas comunidades de todo el país, de acuerdo a un testimonio presentado
el jueves ante una subcomisión del Senado. La tardanza para resolver su
situación los expone a los traficantes de personas y a la trata.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos tiene un presupuesto limitado
para vigilar el bienestar de los menores vulnerables que cruzaron la frontera
sin compañía adulta, y la agencia no pudo localizar a 1,475 niños después de
realizar las llamadas de seguimiento para cerciorarse de que estaban seguros,
dijo un funcionario de la agencia.
Centro
de detención de migrantes en 2014. Foto de AP. |
Las autoridades federales fueron blanco de fuertes críticas hace dos años,
después de revertir políticas de protección infantil destinadas a los menores
que huían de Centroamérica a causa de la violencia. Durante una audiencia de
seguimiento realizada el jueves, los senadores dijeron que las agencias no
asumieron la plena responsabilidad por el cuidado de los menores y han demorado
reformas vitales que son necesarias para evitar que caigan en manos de
traficantes de personas.
“Son los peores tutores del mundo. Ni siquiera saben dónde están”, dijo la
senadora demócrata Heidi Heitkamp. “Estamos fallando. No creo que haya una duda
al respecto. Y me molesta mucho que les fallemos a los niños”.
Desde que se registró un fuerte incremento de cruces fronterizos en 2013, el
gobierno federal ha colocado a más de 180,000 menores con familiares y otros
patrocinadores adultos, de quienes se espera que cuiden a los niños y los ayuden
a asistir a la escuela mientras se resuelve su estatus en las cortes
migratorias.
Una investigación de The Associated Press (AP) en 2016 encontró que más de
dos docenas de menores fueron enviados a casas en las que fueron agredidos
sexualmente, mal alimentados u obligados a trabajar por poco o nulo salario. En
ese entonces, no se sometía a muchos de los patrocinadores adultos a una
minuciosa revisión de antecedentes, los funcionarios del gobierno rara vez
visitaban las casas y, en algunos casos, no tenían idea de que los
patrocinadores habían acogido a varios niños sin parentesco, una posible señal
de tráfico de personas.
Familia
hondureña que migra desde Tijuana hacia Estados Unidos. Foto de
AP. |
Desde entonces, el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS por sus
iniciales en inglés) ha incrementado su asistencia a niños en riesgo que se cree
que necesitan de protección especial, y el año pasado ofreció servicios
post-asignación a casi la tercera parte de los menores que entraron al país sin
compañía adulta, de acuerdo a la Subcomisión Permanente de Investigaciones del
Senado.
Pero los activistas afirman que es difícil saber cuántos niños se encuentran
en condiciones peligrosas, en parte porque algunos de ellos desaparecen antes de
que los trabajadores sociales puedan darle seguimiento a sus casos y nunca se
presentan ante la corte.
Entre octubre y diciembre de 2017, el HHS llamó a 7,635 niños que la agencia
había colocado con patrocinadores, y supo que 6,075 de ellos seguían viviendo
ahí, 28 habían escapado de casa, cinco habían sido deportados y 52 más vivían
con alguien más. El resto estaban desaparecidos, dijo Steven Wagner,
subsecretario interino de la dependencia.
El senador republicano Rob Portman le dio al HHS y al Departamento de
Seguridad Nacional hasta el lunes como plazo para presentar un plan para mejorar
el monitoreo.
“Estos niños, sin importar su estatus migratorio, merecen ser tratados de
manera apropiada, no que se les maltrate o se les trafique”, dijo Portman,
presidente de la subcomisión. “Se trata de responsabilidades”.
Portman comenzó a investigar después de que se registrara un caso en su
estado, Ohio, en el que ocho adolescentes guatemaltecos fueron asignados a
traficantes de personas y obligados a trabajar bajo amenaza de muerte en granjas
avícolas. Seis personas ya fueron condenadas y sentenciadas a una prisión
federal por su participación en la red de tráfico que comenzó en 2013.
Centro de detención de migrantes. Foto de AP de 2014. |
La audiencia se realiza en momentos en los que el gobierno del presidente
Donald Trump ha llamado a enmendar una ley para permitir que el gobierno envíe
más niños inmigrantes de regreso a sus países de origen más rápido cuando no
estén en riesgo de ser víctimas de tráfico de personas.
El gobierno también está presionando por cancelar un acuerdo en una demanda
colectiva que les garantiza a los menores no acompañados ser albergados en el
ambiente “menos restrictivo”, de preferencia con sus padres o algún otro
familiar adulto, mientras aguardan sus audiencias ante la corte migratoria.
El gobierno anunció el año pasado que comenzaría a arrestar patrocinadores
que contrataran a traficantes para traer a sus hijos a Estados Unidos, una
acción que causó escalofríos en las comunidades migrantes de todo el país.
El HHS está reexaminando su interpretación de las leyes existentes para
explorar si es que la agencia es legalmente responsable por los niños una vez
que salen de su programa de asignaciones, dijo Wagner.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS por sus iniciales en inglés) ha
coordinado de manera conjunta con el HHS el cuidado, custodia y deportación de
los menores no acompañados, de acuerdo al testimonio de un funcionario de
Seguridad Nacional.
“El DHS ha trabajado estrechamente con el gobierno del presidente Trump y los
miembros del Congreso para atender los ‘vacíos’ existentes que les permiten a
los individuos explotar nuestras leyes migratorias”, dijo James McCament,
subsecretario adjunto del DHS.
Caravana de mgrantes que se dirigen desde Tijuana
hasta Estados Unidos. Foto de AP. |
Una vez que un niño migrante cumple los 18 años, ya no es elegible para
permanecer en instalaciones gestionadas por el HHS, y se requiere que la agencia
informe al DHS si esa persona debe ser detenida o dejar en libertad. Sin
embargo, el HHS únicamente pasa el reporte de uno de cada tres niños, de acuerdo
a hallazgos de la subcomisión.
El número de menores que solicitan refugio en Estados Unidos no ha vuelto a
los niveles del 2013, pero la creciente violencia y el narcotráfico en Honduras,
Guatemala y El Salvador continúa desplazando a niños, adolescentes y familias en
una migración hacia el norte.
El demócrata de mayor rango en la subcomisión, el senador Tom Carper, dijo
que las agencias necesitan hacer más para evitar los abusos.
“Dado todo lo que aprendimos en 2015 y 2016, es inaceptable que sigamos
siendo tan malos en seguirles el rastro a estos niños”, declaró Carper.
Migrante de Honduras con su bebé espera cruzar a
Estados Unidos. Foto de AP.
|
¡Hazte voluntario para traducir al español otros artículos como este! manda un correo electrónico a espagnol@worldcantwait.net y escribe "voluntario para traducción" en la línea de memo.
E-mail:
espagnol@worldcantwait.net
|