“Tu
gobierno está librando una guerra asesina ilegítima
contra Irak, basada en mentiras, y tiene a otros países en la mira”.
Haditha, Irak,
19 de noviembre de 2005, 7:15 de la mañana: Despertaron con el estallido de una
bomba fuera de las casas. Enseguida, los “marines” estadounidenses entraron
disparando. Unas personas estaban todavía en cama, otras se escondieron en el
armario rezando que nada se les pasara. Abuelas, madres, padres y hasta niños de
dos años murieron a balas, sin saber qué estaba pasando ni por qué. Esto es el
“progreso” en Irak que dice Bush.
Hasta la fecha
no se sabe toda la verdad de esta matanza, porque las fuerzas armadas la han
tapado desde un principio. Llevaron los cadáveres a un hospital, diciendo que
fueron víctimas de una bomba en la carretera. Afortunadamente, varios iraquíes
valientes alzaron la voz contra el asesinato de sus seres queridos.
Las fuerzas
armadas han reconocido que 15 de al menos 23 víctimas no eran combatientes, pero
al mismo tiempo dicen que en una de las tres casas había insurgentes armados con
metralletas AK-47. Los residentes de Hadita disputan la acusación.
Los “marines” aprovecharon la bomba, que
mató a un soldado, para justificar los asesinatos vengativos de civiles
iraquíes. Así es la realidad de la ocupación estadounidense. El Congreso y los
medios de comunicación se enfrascan en debatir la “ineptitud” de Bush, pero casi
nunca hablan de la naturaleza asesina de esa guerra: las masacres como la de
Haditha, las armas químicas usadas contra civiles en Faluya, los bombardeos
indiscriminados, etc. Esta masacre no es una aberración; va junta con la tortura
sistemática en Abu Ghraib y otros lugares, y la naturaleza general de esa
guerra. Nosotros, que vivimos en el país cuyo gobierno realiza esas atrocidades
en nuestro nombre, tenemos una profunda responsabilidad de oponer resistencia y
organizar a detener ese desastre antes de que les quite la vida a otras personas
inocentes.
¡El mundo no puede esperar! ¡Hay que sacar
corriendo al gobierno de Bush!
(Fuente: “Collateral Damage or Civilian
Massacre in Hadita?”, Time Magazine edición en línea, 19 de
marzo). |